Es necesario superar las crisis del presente y las amenazas estratégicas y existenciales que pesan sobre la humanidad
Héctor Casanueva
Infobae - 6 de noviembre de 2023
Si nos quedamos detenidos en lo que estamos viviendo por estos días, con la invasión de Rusia en Ucrania y el ataque de Hamas contra Israel, puede parecer un poco desubicado y ocioso hablar del futuro. Pero las crisis del presente solo se pueden resolver poniendo la mirada larga, las convergencias posibles, los entendimientos necesarios. Es lo que proponemos los futuristas, que, al estudiar el pasado y las tendencias del presente, empleamos la prospectiva estratégica para crear escenarios de futuros posibles que permitan reducir la incertidumbre, eliminar o atenuar las amenazas y riesgos, aprovechar las oportunidades y proponer un horizonte mejor y sostenible. En esto estamos plenamente de acuerdo y respaldamos lo que propone el Secretario General de las Naciones Unidas.
Toda guerra hipoteca el futuro de quienes la sufren directamente, pero también de la comunidad internacional en su conjunto. Con mayor razón ahora que en el mundo globalizado nada escapa a sus consecuencias. El actual escenario internacional justifica plenamente atender con urgencia al reiterado llamamiento del Secretario General de las Naciones Unidas a la comunidad internacional, a suscribir un Pacto por el Futuro, para superar las crisis del presente y las amenazas estratégicas y existenciales que pesan sobre la humanidad. Un pacto universal para la paz, la cooperación y el desarrollo, a construir desde hoy, para asumir colectivamente un cambio de rumbo.
Lejos de una lectura catastrofista, basado en evidencias indiscutibles y en la observación de la realidad, con la Carta de las Naciones Unidas, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el derecho internacional de su parte, Antonio Guterres parece muchas veces una voz que clama en el desierto de la indiferencia e inacción de los estados miembros. Lo hemos visto en estos días, en que se juega a fondo por contener la locura de la guerra en el Cercano Oriente, siendo objeto de tergiversaciones y amenazas, cuando está haciendo lo que le corresponde y apelando a la consecuencia de los Estados, que hace solo un mes, durante la 78ª Asamblea General, hicieron gala de una retórica políticamente correcta, pero que no está siendo honrada sino, incluso, contradicha con hechos contundentes.
Para la Cumbre del Futuro, a celebrar en septiembre de 2024, en cuya preparación ya se está trabajando, se propone celebrar un “Pacto por el Futuro”, que sea un efectivo compromiso de los estados miembros con las nuevas generaciones. El Pacto, según decisión adoptada en la reciente reunión ministerial, debería abarcar cinco grupos de temas: Desarrollo Sostenible y Financiamiento para el Desarrollo; Paz y Seguridad Internacionales; Ciencia, Tecnología, Innovación y Cooperación Digital; Juventud y Generaciones Futuras; Transformación de la Gobernanza Global. Esto último tiene que ver claramente con la reforma de la ONU, unas Naciones Unidas 2.0, como lo llama Guterres, un nuevo Consejo de Seguridad que pueda incidir en la prevención o contención de las guerras, también con nuevos temas, y una capacidad ampliada para apoyar a los estados en la gobernanza anticipatoria en temas cruciales emergentes.
Lee aquí la nota completa
- August 2024 (2)
- July 2024 (26)
- June 2024 (27)
- May 2024 (24)
- April 2024 (27)
- March 2024 (24)
- February 2024 (27)
- January 2024 (23)
- December 2023 (17)
- November 2023 (21)
- October 2023 (29)
- September 2023 (20)
- August 2023 (25)
- July 2023 (4)
- June 2023 (25)
- May 2023 (17)
- April 2023 (48)